Boletín turismo 04b/19

La empresa de ciberseguridad Symantec ha hecho un estudio que revela que dos de cada tres hoteles de todo el mundo protegen muy débilmente los datos que gestionan sus clientes, lo que facilita que puedan ser utilizados por anunciantes y delincuentes. En concreto, en muchas ocasiones, los enlaces de confirmación de reserva que se envían por correo electrónico, permiten a cualquiera que tenga ese enlace ver los detalles de la reserva e, incluso, los datos personales de la persona que hizo la reserva.

La bicicleta empieza a verse como un añadido fundamental para mejorar la experiencia de los viajeros, facilitándoles el conocer de una forma distinta los destinos y, así, generar un turismo más sostenible, eficiente y humano. La bicicleta es perfecta: implica un tipo de turista respetuoso con el destino, interesado por las costumbres locales y con unos hábitos muy saludables. Un perfil distinto al de otros que buscan el sol y la playa, por lo que resulta perfectamente factible en los establecimientos de turismo rural, en los que se puede valorar su oferta en alquiler.

En la actualidad, es habitual que los clientes tengan más y mejores herramientas tecnológicas que las empresas con las que tratan, siendo esto particularmente cierto en la industria turística. Según un estudio de ITH, el 73% de los hoteleros españoles piensa que sus establecimientos tienen un alto grado de digitalización, pero la triste realidad es que sólo el 36% alcanzan ese nivel. En los hoteles, el nivel de digitalización es muy variable, lo que permite identificar oportunidades de mejora y puntos débiles en los que incidir para avanzar en la experiencia de cliente y la eficiencia en costes.

Muchas series y películas se ruedan en escenarios naturales ubicados en entornos rurales, como por ejemplo, el pueblo segoviano de Arahueste, que da vida al imaginario Sagrillas de la serie Cuéntame como pasó. Existen oportunidades para «maridar» visitas a escenarios de rodaje con rutas enológicas, que complementen la oferta y hagan la misma más atractiva a todo tipo de públicos y familias, lógicamente implementadas con estancias en establecimientos de turismo rural.

En su intervención en la cumbre Mundial de la World Travel & Tourism Council, celebrada en Sevilla en el Mes de Abril, el ex-presidente norteamericano Barack Obama, destacó el papel del turismo como puente entre culturas, como vehículo para superar diferencias, recordar todo lo que tenemos en común los seres humanos y reconocernos los unos en los otros.

Según el estudio ‘Percepción y uso de la tecnología por parte del huésped’, realizado por el ITH (Instituto Tecnológico Hotelero) y la firma IZO, existe una brecha entre las tecnologías implantadas por las empresas hoteleras y las que demandan los huéspedes. Así, mientras las empresas eligen implantar chatbots, sensórica y domótica e inteligencia artificial, los clientes demandan wifi, comparadores para los procesos de reserva y apps para gestionarla. La interpretación más inmediata, totalmente aplicable a nuestros establecimientos de turismo rural, es que se deben asegurar los servicios básicos, más valorados por los potenciales clientes, fundamentalmente relacionados con la wi-fi y el proceso de reservas, antes de intentar desarrollar tecnologías más novedosas y arriesgadas, que pueden convertirse en esfuerzos vanos.

Según el Observatorio de Turismo Rural, una iniciativa de investigación conjunta desarrollada por EscapadaRural.com, CETT- Campus de Turismo y Netquest, en el turismo rural apenas existe especialización en la oferta, lo cual, según el propio Observatorio, representa una oportunidad de crecimiento para aquellos establecimientos de turismo rural que configuren su oferta adaptada a las necesidades de segmentos específicos de viajeros, por ejemplo, aquellos que viajan acompañados de sus mascotas.

El big data se está convirtiendo en la tecnología que mejor entienden la mayoría de empresas turísticas de cara a aplicarla en el corto plazo. Una vez superado el reto que ha supuesto la adopción de internet como principal canal de comunicación con los clientes, y de comercialización de los productos, las empresas se enfrentan a nuevos desafíos vinculados a utilizar la tecnología para seguir optimizando sus procesos y prestando un mejor servicio a sus clientes. En ambos casos, el big data puede hacer una gran aportación, y es por esto que cada vez están surgiendo más startups que se dedican a ayudar a las empresas en la recopilación, gestión, análisis y toma de decisiones basadas en los datos.